Por Juana Demarchi
Programa de Defensoras Ambientales del Fondo de Mujeres del Sur
El Programa Defensoras Ambientales comenzó a fines de 2014 con financiamiento de la Unión Europea, y fue implementado por el FMS en conjunto con dos organizaciones socias: el Centro de Capacitación en Investigación de la Mujer Campesina de Tarija (CCIMCAT) de Bolivia, y la Fundación Plurales de Argentina.
Actualmente, el Programa continúa en el marco de GAGGA Sudamérica, la Alianza Global sobre Género y Medio Ambiente, junto con otros fondos de mujeres y ambientalistas y ONGs para promover un medio ambiente limpio, saludable y seguro y el reconocimiento de la intersección entre justicia socio-ambiental e igualdad de género.
Desde el Fondo de Mujeres del Sur (FMS) impulsamos este Programa con el objetivo principal de fortalecer a grupos liderados por mujeres organizadas en defensa de sus derechos económicos, sociales y ambientales. Brindamos apoyo y acompañamos a los grupos apostando a su liderazgo y al fortalecimiento de sus organizaciones.
Son las mujeres quienes detectan qué necesidades tienen y cómo van a gestionar el apoyo financiero para lograr sus objetivos de defensa del ambiente, sus derechos y los de sus pueblos. Con el apoyo que brindamos, refuerzan sus capacidades para interactuar con el Estado y actores clave para establecer diálogos y mejorar sus condiciones de vida.
Demandas ancestrales
Las defensoras ambientales que actualmente trabajan en la región, son por lo general campesinas, indígenas y/o mujeres de grupos marginales urbanos. Ellas luchan por el acceso al agua y por la tenencia de las tierras de sus comunidades, o en contra de la contaminación y desforestación de sus territorios. Reivindican la preservación de los recursos naturales, y la soberanía alimentaria, como base para desplegar estrategias de supervivencia.
Los territorios ancestrales de las comunidades indígenas, las zonas rurales y los suburbios de las ciudades son territorios marginalizados, en donde se instalan industrias que hacen un uso indiscriminado de los bienes naturales, generando una situación de alta vulnerabilidad.
Las mujeres son quienes permanecen en sus tierras y en sus hogares, encargándose de mantener a sus familias y defender sus comunidades, y se ven impulsadas a liderar la defensa del medioambiente y de la integridad de sus pueblos.
Las defensoras ambientales se encuentran en contextos de fuerte desbalances de poder: corren un riesgo superior por el solo hecho de ser mujeres, padeciendo amenazas, criminalización y agresiones físicas y sexuales por parte de agentes privados o estatales. A la hora de plantear reclamos o exigir el cumplimiento de leyes, deben contar con conocimientos de procesos legales y problemáticas ambientales.
En este sentido, cada integrante de los grupos apoyados por el FMS ha participado y a su vez, organizado, talleres de capacitación en incidencia política, de desarrollo de recursos y sostenibilidad de organizaciones, y de comunicación estratégica. Esto les permite avanzar en diálogos y demandas con la comunidad hacia actores clave y el Estado. Asimismo, llevan a cabo actividades conjuntas de formación y encuentros con otras comunidades, y participan de movilizaciones convocadas por otras organizaciones como el 8M, 25N “Vivas nos queremos”, 12 de Octubre “Día de la dignidad indígena”, entre otros.
Acciones que transforman
Cada grupo que apoyamos realiza diversas y variadas actividades para visibilizar su lucha y su compromiso con la identidad cultural y la preservación de sus territorios. De esta manera por ejemplo, las Mujeres Guaraní de Macharety en Paraguay han logrado construir 13 aljibes, los cuales les han permitido almacenar agua potable y enfrentar situaciones de emergencia y problemas que generan las largas sequías en la zona del Chaco Paraguayo. Ellas se encargaron de la compra de materiales y la ejecución del proyecto que beneficia a más de 80 personas en su comunidad. Continúan proyectando acciones para incidir políticamente ante autoridades estatales para la construcción de nuevas formas de captación del agua para la comunidad y para tener participación directa en políticas dirigidas a los pueblos indígenas.
Las Mujeres Raíces de la comunidad Kuñareta Japovae de Jujuy, Argentina lograron abrir una causa legal por deforestación indiscriminada en sus territorios. Con el donativo pueden hoy seguir el procedimiento legal en compañía de una comunicadora que lleva a cabo el registro de todo el proceso, y una abogada que las respalda legalmente en sus acciones.
Las Mujeres de Entre Ríos de Bolivia desde el 2016 lograron lanzar un programa radial sobre cuidado del agua, del medio ambiente, y de derechos de las mujeres. Los programas tienen audiencia masiva, lo cual implica un fuerte compromiso de las comunidades, ya que se transmiten testimonios sobre cómo viven en su comunidad y cómo les afecta el cambio climático. Mediante estas transmisiones también se hace seguimiento de los compromisos que adoptan las autoridades estatales en respuesta a las demandas de las comunidades con respecto a la defensa de los territorios y bienes comunes.
Luego de los tres años de implementación del Programa Fortaleciendo a las Defensoras Ambientales del Chaco Americano (Argentina, Bolivia y Paraguay); y en el marco actual del Programa de la Alianza Global sobre Género y Medio Ambiente (GAGGA), los grupos de mujeres defensoras del medioambiente cumplen un rol central en la lucha por los derechos indígenas y ambientales, y han logrado instalar en la agenda pública la problemática ambiental como un eje de violencia que afecta a las mujeres de manera particular.
En 2018, desde el FMS seguiremos asumiendo el compromiso de asegurar el acompañamiento y el apoyo a liderazgos comunitarios de mujeres para lograr la justicia socio-ambiental y el cumplimiento de sus derechos como mujeres campesinas, indígenas y urbanas marginadas, en defensa de la integridad de sus territorios y de su autonomía.